En verano son frecuentes las tormentas y también suele ocurrir que tras el paso de una de ellas el agua y el entorno de nuestra piscina que presentaba antes de la tormenta un aspecto reluciente, agua cristalina, superficie sin hojas, color azul……….., después de la misma su aspecto cambia radicalmente a agua con coloración verdosa, hojas en la superficie y tierra en el fondo, ¿ Se puede hacer algo cuando preveamos que puede haber una tormenta ?.
Nuestros consejos para intentar evitar al máximo posible las consecuencias negativas de las tormentas sobre las piscinas:
- Aumentar la cloración hasta una cantidad cercana a 2 mg/l ( 2ppm), esto evitará que el aumento de la materia orgánica y la temperatura del agua favorezca la proliferación del fitoplacton que provocaría el aspecto verdoso del agua.
- Mantener la depuradora encendida las 24 horas del día, disminución de la materia en suspensión y materia flotante.